Marca la diferencia, no tengas miedo de proponer nuevas cosas, ponle esfuerzo, ponle ganas, pasión, disfruta con ello... Así son los emprendedores. Esos trabajadores que prefieren comer bistec con las manos a filete con cubiertos de oro. Aquellos trabajadores que abren la puerta donde pone "Prohibido el paso" esperando encontrar un oasis.
Todos tenemos que intentar ser lo más emprendedor que podamos, nadie debe conformarse con hacerse una casa en la rama del árbol cuando podemos seguir escalando y hacernos un chalet en la copa.
Levántate cada día con esta actitud, sin buscar resultados, pero abriéndoles los brazos si los encuentras.