Voy a explicar esto con un ejemplo tan sencillo como el mítico juego de nuestra infancia: "El teléfono". En dicho juego, un mensaje iba pasando de persona a persona, hasta que llegaba al último, y el mensaje que a este le llegaba, no tenía nada que ver con el mensaje con el que se comenzó el juego.
Pues bien, ésto podemos llevarlo facilmente a la rutina diaria. Vemos como la gente modifica los mensajes a su antojo por motivos personales, políticos, etc., incluso los propios informativos, que deberían informarnos de la verdad, a veces (muchas) suelen "variar" las noticias mirando por unos intereses determinados.
No hay que irse muy lejos. Uno de los motivos principales de la distorsión son los rumores, sí, eso que tanto gusta a muchos y a muchas, sobretodo cuando llegan a sus manos y tienen total libertad para modificarlos.
Es curioso ver como la primera persona que expande el rumor de que "han pillado a menganito robando", a la última persona a la que llega el rumor es que "menganito ha atracado un banco y ha matado un policia".
Así que ya sabeis, si os pasan una "llamada", colgad.
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